Quizás es tiempo de escribir un "Manifiesto Chthuluceno". "Mi" Chthuluceno es el tiempo de composiciones mortales que están en juego unas por otras y unas con unas. Esta época es el kainos2 (ceno) de los poderes en desarrollo constante que son Terra, de aquellos con una miríada de tentáculos en todas sus materialidades, espacialidades y temporalidades difractadas y unidas por membranas interdigitales. Kainos es la temporalidad del espeso, fibroso y grumoso "ahora", que es y no es antiguo. El Chthuluceno es un ahora que ha sido, es, y aún está por venir. El Chthuluceno es un espacio-tiempo inexorablemente difractado (recuerden a Karen Barad sobre los campos cuánticos en Meeting the Universe Halfway). Estos poderes surgen a través de todo lo que es Terra. Son destructivo/generativos y no son el recurso secreto de nadie. No están acabados y pueden ser terribles. Su resurgimiento puede ser terrible. La esperanza no es su género, pero si podría serlo el reclamar respons-habilidades. Las fuerzas terrenas matarán a los insensatos que no paran de provocar. Esos tontos, que permanecen aunque hayan sido asesinados, deambularán como fantasmas atormentados en una destrucción tentacular continua.
Imágen: Fabrizio Terranova |
Donna Haraway, invierno 2015
Donna Haraway es Profesora Emérita del Departamento de Historia de la Conciencia y del Departamento de Estudios Feministas de la Universidad de California, Santa Cruz, Estados Unidos. Es autora de numerosas publicaciones, incluyendo el Manifiesto Ciborg y del Manifiesto de las Especies de Compañía: Perros, Personas y Otredades Significativas
Traducción Helen Torres
1 Revisado de “Donna Haraway y Cary Wolfe en Conversación,” de próxima publicación en Manifestly Haraway (University of Minnesota Press, 2015).
2 Kainos:nuevo, reciente
3 Nunca sola http://neveralonegame.com/
2 No nos hemos puesto de acuerdo con la traducción del eslogan Make kin, not babies.... Yo apuesto por el grito: “¡Hacemos ayllu, no familias!”. El verbo “hacer” en primera persona del plural nos aleja de exhortar a hacer, como si fuera un mandato ejecutable por otras personas que no somos nosotras; y ayllu viene a proponer una forma de organización que traduce mucho mejor la idea de kin en tanto lazos comunitarios no exclusivamente sanguíneos. La resignifcación del concepto de familia o de parentesco se ha trabajado sólo en contextos feministas anti-identitarios, pero está lejos de entenderse más allá de los vínculos de sangre en una sociedad patriarcal heterocentrada como la nuestra. Lástima que en Europa “ayllu” no signifca nada, y que a veces la gente es demasiado perezosa para cambiar el centro... así que a veces digo: “¡Creemos parentesco, no familias!. (Nota de la traductora).
En su wordpress, Helen Torres nos explica algo mas de este Manifiesto.
It’s time for Chthulu.
"En su último manifiesto, el “Manifiesto Chthuluceno desde Santa Cruz“, Donna Haraway, profesora emérita de Historia de la Conciencia y Estudios Feministas de la Universidad de California, propone una nueva era, el Chthuluceno, “un ahora que ha sido, es, y aún está por venir”. A través de un ejercicio de ciencia ficción, Haraway nombra un espacio-tiempo difractado que más allá y más acá del llamado Antropoceno, nuestra era actual.
Dando un giro conceptual a las horrendas criaturas imaginadas por Lovecraft en sus mitos del Cthulu, Haraway cambia la grafía “cth” por “chth”, subvirtiendo el terror a lo subterráneo a través del llamado a las fuerzas chthónicas (chthnonic, en inglés, en griego, “de la tierra”) divinidades del mundo subterráneo en la mitología griega, buscando nuevos imaginarios en narradores como Ursula K. Le Guin, o la película Nausicäa del valle del viento, de Hayao Miyazaki. Su llamado final, Make Kin, Not Babies! (¡Hagamos parentesco, no familias!), nos invita a tejer relatos de relaciones multi-especies para una supervivencia colaborativa, un resurgimiento de la vida en este escenario de doble muerte.
Entre febrero y junio de 2016 llevamos a cabo en la Librería La Caníbal un club de lectura en torno al Manifiesto Chthuluceno, al que traduje al castellano para la revista Laboratory Planet. Trabajamos inspirándonos en el juego de las cuerdas (cat’s cradle game) para generar un pensamiento situado, distribuido, global e inapropiable, dando los primeros pasos hacia la gestación de una traducción encarnada y performativa del manifiesto, jugando con sus ramificaciones tentaculares y la necesidad de repensar Gaia, la “humanidad” y las relaciones interespecies.
Como criatura bastarda del manifiesto, en noviembre de 2016 coordinamos un taller de lectura performativa con Nadège Piton y el colectivo Quimera Rosa en las jornadas It’s time for Chthulu –organizadas por la Asociación Emmetrop & Quimera Rosa en el marco de los Rencontres Bandits Mages– en el que traducimos el Manifiesto a una performance basada en una narrativa híbrida entre movimiento corporal, gestos, voces, textos e imágenes".