Itziar Ziga |
Sagrado significa que no es del todo nuestro, sino de un poder superior: llámalo Dios, llámalo patriarcado. Los cuerpos de las mujeres han sido mistificados para arrebatarnos todo poder social y es precisamente lo que nos diferencia anatómicamente de los hombres, aquello que nos es usurpado, enturbiado, culpabilizado. Nuestra sexualidad y nuestra capacidad gestante. Los crímenes de honor por los que una chica agredida sexualmente avergüenza a toda su familia, la cultura de la violación, la medicalización del parto, la prohibición del aborto, la negación de nuestros orgasmos, el estigma puta, la persecución policial de las prostitutas y la explotación de mujeres indocumentadas por parte de mafias, todo viene del mismo asalto sexual. Me llevan los demonios al pensar en el inasumible porcentaje de mujeres que quedan traumatizadas de por vida tras una violación.