sábado

BELL HOOKS Y EL SUJETO FEMINISTA por EDUARDO NABAL

Bell Hooks. 1996

Siempre consideré a Bell Hooks como una de las voces mas suaves del movimiento negro. No conozco toda su obra y no he leído su último libro traducido al castellano: “Enseñar a transgredir”. Carecía del verbo furioso y también de la larga experiencia de gente como Lorde, Alice Walker… y además, su escritura siempre tuvo como objeto el ensayo aunque en ella no estuviera reñido con la poesía.

No obstante Hooks planteaba una y otra vez, cada vez con mayor complejidad, un tema que, aún hoy, sigue en el candelero y es la ruptura del “sujeto mujer” del feminismo clásico. No se encontraba muy a gusto entre los discursos de las feministas blancas de clase media con Betty Friedman a la cabeza y también vió y vivió el sexismo dentro de algunos sectores del movimiento negro.

De esta agua, aparentemente turbia, surge la necesidad de revisar categorías unitarias y abrirlas a la interseccionalidad y la multiplicidad lejos del esencialismo. Algo así les ha ocurrido a las mujeres precarias, lesbianas, a las transexuales y un largo etcétera todavía objeto,  por ejemplo recientemente en el estado español, de agresivas polémicas.

Pero Hooks ya desde su primer libro "¿Acaso no soy una mujer?", plantea, revisitando la época de la esclavitud y el sometimiento las violencias simbólicas y explicitas de las mujeres negras, que sufrieron el paternalismo tanto del movimiento feminista institucional como el silencio o los olvidos del movimiento negro mas virilizado.

Hooks no gritaba tan fuerte como pudieron hacerlo otras. Su prosa es tersa y, en ocasiones, conciliadora, pero también sabe que hay algo en el llamado “feminismo” que debe abrirse a nuevos espacios de lucha y que para ello deben reinventarse espacios, fronteras e incluso el mismo concepto de “mujer” se queda pequeño y corto de miras a la hora de los nuevos terrenos y caminos de empoderamiento.

Es por ello por lo que la autora de “Teoría feminista: de los márgenes al centro” lanza nuevamente el desafío de habitar la casa de la diferencia en un mundo capitalista, globalizado, marcado por fronteras raciales, dictaduras del género y violencia institucional.

Hooks nos ha dejado pero sus textos siguen enredados en un movimiento feminista que, en ocasiones, parece no haber pasado por la herencia de sus mejores voces: mujeres negras, poetas, insumisas al lenguaje del amo.


"Bell Hooks y el sujeto feminista" por Eduardo Nabal

Este artículo es un pequeño homenaje a Bell Hooks, que falleció el pasado miércoles 15 de diciembre.