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LA CLOROFILA EN LA PIEL...Y LA SANGRE (Proyecto TransPlant) por EWEN CHARDRONNET


Durante los encuentros Bandits-Mages de Bourges (Francia), el colectivo Quimera Rosa presentaba “TransPlant”, un proyecto de arte biohacking que propone la inyección y el tatuaje de clorofila para devenir humanx-planta. Esto a través de la apropiación de la terapia fotodinámica DiY utilizada en cancerología…

“El verde es el nuevo rojo.” El 11 de noviembre en el Transpalette de Bourges, en el marco de la exposición Entropía y con motivo de los encuentros Bandits-Mages, el colectivo nómada formado en Barcelona Quimera Rosa, presentó el proyecto TransPlant de transición hacia un devenir-planta. Lxs Quimera Rosa, Ce y Kina, sueñan que una hibridación de clorofila-sangre recorra sus venas, con tatuajes que lleven a cabo la fotosíntesis.

Presentación del proyecto “TransPlant” por Quimera Rosa en los encuentros Bandits-Mages. © Pascal Vanneau.


El sueño de ciencia ficción biopunk no es tan nuevo. Se puede encontrar desde los años 1920 con los primeros científicos que se interesaron en el estudio de los organismos marinos (babosas marinas, gusanos, etc), siendo capaces de alimentarse parcial o totalmente a través de la fotosíntesis generada por los cloroplastos de algas presentes en su piel (nos referimos a esto el año pasado en Makery). Más cercano a nosotrxs, Lynn Margulis, la bióloga de la teoría endosimbiótica y co-autora con James Lovelock de la hipótesis Gaïa, imaginaba la llegada de un “homo fotosinteticus” que se alimentaría con baños de sol en las playas del sistema solar...
Todavía más recientemente, el escritor de ciencia ficción Kim Stanley Robinson da en "Oral Argument", una novela publicada en diciembre del 2015 durante el COP21, un estudio sobre un futuro donde los biologistas de síntesis habrían encontrado en el registro Igem unos “biobricks” que pueden ser combinados de manera que se pueda crear un cloroplasto sintético y células humanas capaces de realizar fotosíntesis. En la historia de Robinson, los biólogos modifican las agujas de tatuar para inyectar fibroplastos-cloroplastos en la piel humana, como se hace con un tatuaje ordinario. Ellos crean una empresa llamada Sunskin pero deciden rápidamente poner su trabajo open source (código abierto), ya que la fotosíntesis es un proceso natural. El equilibrio planetario es entonces revolucionado (para más detalles teóricos, leer “Devenir fotótrofo”, publicado en enero de 2016 en el periódico La Planète Laboratoire). 


El público fue invitado a probar la clorofila. © Pascal Vanneau

© Pascal Vanneau
 Bolsas de plástico llenas de clorofila que el público podía ir bebiendo durante la performance. A un lado de la imágen la piel bacteriana colgando y proyectada en ella el código de apertura del chip implantado en la mano de una de nosotras con moléculas de clorofila en vista microscópica © Amar belmabrouk

Tatuaje clorofílico

Quimera Rosa propuso entonces en el marco de Bandits-Mages tatuarse una elysia esmeralda (elysia clorótica), una babosa marina que posee una epidermis fotosintética.
A diferencia de la biología de síntesis de Robinson, el abordaje de Quimera Rosa es (todavía) artesanal, gracias a la concepción de tintas de clorofila. “Nosotros procedemos con dos clorofilas. La primera, no fotosintética, una clorofila modificada para uso alimenticio que hemos comprado y que mezclamos con los productos habituales de tintas para tatuajes”, explica el dúo (10 gr de sodio de clorofila cuprica (E141), un colorante alimentario vegetal, 100ml de agua de hamamelis, una planta utilizada frecuentemente para fortalecer los vasos sanguíneos, 5ml de propilen glicol y 5ml de glicerina médica). La segunda tinta fue sintetizada durante la performance, a través de “una extracción de alcohol muy simple, con los recursos disponibles, para constituir una tinta viva en la cual se puede verificar la fotosensibilidad a los rayos ultravioletas y que se puede utilizar inmediatamente para tatuar”. Ce utilizó estas dos tintas para tatuar a Kina en vivo, realizando un primer diseño de la elysia con la tinta no fotosintética, y un relleno de color con la otra fotosensible.


Extracción de clorofila y pruebas de fotosensibilidad a la luz negra. © Pascal Vanneau

Tatuaje de la elysia esmeralda con clorofila. © Pascal Vanneau

Tatuaje de la elysia esmeralda con clorofila. © Mam Ita

Primera fase del tatuaje de la babosa marina. © Maria F. Dolores



Somateca

Esta fase es sólo una de las etapas de TransPlantgreen is the new red, un proyecto de código abierto “transdisciplinario de bio-arte y de hibridación planta/humano/animal/máquina que va a desarrollarse a lo largo de los siguientes años”. TransPlant pone en diálogo disciplinas como el arte, la filosofía, la biología, la ecología, la física, la botánica, la medicina, la enfermería, la farmacología y la electrónica. Apoyándose en diversas prácticas del biohacking, Quimera Rosa quiere “producir cambios de subjetividad y deconstruir diferentes tipos de narrativas que presentan el cuerpo como una unidad. Estos ejes son por el momento: hibridación de sangre humana con clorofila con un protocolo regular de inyecciones por intravenosa, traducción externa con tatuajes de clorofila, implantación de un chip electrónico RFID donde estarán almacenados los datos del proceso y presentando el cuerpo como una somateca5, desarrollo y conexión al cuerpo de sensores propios a las plantas (nivel de acidez del entorno, frecuencias electro-magnéticas especificas…) y feed-back con la actividad corporal, auto-experimentación medica sobre condylomata acuminata, constitución de una base de datos publica open-source de los experimentos.”

Tintas de clorofila de Quimera Rosa.


Tintas de clorofila de Quimera Rosa.



Devenir cyborg

En agosto pasado, Yan se implantó un chip RFID y decidió cambiar su nombre por Kina, una vía para este miembro de Quimera Rosa de afirmar su “transición humano-planta”. El chip que Kina se implantó es una versión libre, no detectable, de la tecnología de rastreo. “Tener implantada una versión libre, no detectable y de mas capacidad permite considerar esta tecnología para usos imprevistos, no normalizados. Transformar una tecnología de identificación en una tecnología post-identitaria utilizada para hackear lo que se llama ser humano.” Y con su proceso de transición Yan/Kina quiere hacer reconocer socialmente “la pérdida de mi condición de humano y la adopción de un nuevo nombre”. Así como de ironizar sobre la supuesta “locura” de su decisión:

“Y no estoy segura de querer ser cobaya de psiquiatras deseosos de verificar si me siento como una planta atrapada en un cuerpo humano y de que inventen un trastorno de disforia de reino, o bien si mi voluntad fotosintética no es una manifestación extrema de una anorexia reprimida, o si mi admiración por el silencio vegetal es la evidencia de una tendencia complotista y asocial. ”
Kina de Quimera Rosa

Kina recuerda también que las perras, perros y otros animales han sido implantados con chips mucho antes que los humanos y que su transición es también en este sentido un devenir-ciborg como se plantea en el Manifiesto Cyborg de la filósofa americana Donna Haraway.

“El primer cyborg fue un ratón desarrollado en un laboratorio en los años 60 en el contexto de la carrera al espacio. El devenir cyborg es ante todo un devenir animal, les disguste a los trans-humanistas y a sus sueños de mejora de la especie humana mediante la fusión con la tecnología. Soy un perro. O más bien una perra. ”
Kina de Quimera Rosa

“Basicamente no confundir el Manifiesto Cyborg de Haraway con el Manifiesto Terminator de Hollywood. Mi voluntad no es la de devenir mas humana sino menos humana. No es realmente un deseo de devenir planta si no de una hibridación con lo vegetal, de devenir con. De transitar juntas. Making kin. Not babies.”

Lectura del texto que explica el implante de RFID y el proceso de transición por Nadège Piton, coordinadora artística del Transpalette. © Amar Belmabrouk

© Pascal Vanneau




Cancerología DIY

La explicación de Quimera Rosa sobre el trámite de la inyección de clorofila es que se trata más ampliamente de una experimentación biomédica sobre los condilomas (verrugas genitales) y el virus de papiloma humano (VPH), responsable de un gran número de infecciones de transmisión sexual. “Queremos llevar a cabo una experiencia Do It Yourself de terapia fotodinámica, es decir, inyectando clorofila y proyectando allí un láser”, nos dice Kina. “El VPH es un virus de transmisión sexual, uno de los más comunes actualmente, pero es un virus bastante desconocido sobre el cual circula poca información”. El virus es la causa mayor por la que se contrae cáncer de útero. “Nos hemos dado cuenta que los estudios que circulan conciernen frecuentemente a los cuerpos que tienen ovarios, pero aquellos estudios que conciernen los cuerpos que son desprovistos de ovarios, no están tan desarrollados”, dice Cé. Y ambos agregan: 

“La terapia fotodinámica es utilizada en oncología de la piel, es bastante innovador, funciona bien con los cánceres localizados, pero no es para nada accesible aun. La tasa de cura es bastante alta, la tasa de invasión corporal es bastante baja. A través de esta auto-experimentación médica sobre los condilomas, queremos también desarrollar y difundir el conocimiento de esta terapia.”. 
Quimera Rosa.

Las Quimera Rosa han aprendido hasta este punto los métodos de extracción y de transfusión. Ellxs buscan a partir de ahora colaboraciones para un seguimiento biomédico y el establecimiento de protocolos para la fase de transfusión. Con la idea de hacerlo ellxs mismos igualmente, de manera regular. Continuará…

La instalación “TransPlant” de Quimera Rosa es visible hasta el 8 de enero 2017 en el marco de la exposición “Entropía” en el Transpalette, Bourges.




Artículo original "La chlorophylle dans la peau… et le sang" de  Ewen Chardronnet.
Traducción al castellano: Mariangela Pluchino
Arreglos: Quimera Rosa

Si queréis más información sobre la Quimera Rosa y su proyecto TransPlant podéis visitar estos enlaces.

Además recientemente se ha publicado un vídeo en Tele Sur donde Cé y Kina nos cuentan algo más sobre su proyecto.


El colectivo Quimera Rosa estará en Residencia en el Hangar del Barcelona del 20 de Marzo al 2 de Abril del 2017. Y buscan colaboradoxs.

"El colectivo Quimera Rosa estaremos de residencia en Hangar para desarrollar parte del proyecto TransPlant en el cual estamos trabajando desde hace más de un año.
Para esta residencia deseamos desarrollar TransPlant: Mi enfermedad es una creación artística: la parte de auto-experimentación medica sobre condylomata acuminata, una ITS producida por el HPV (Virus del Papiloma Humano) y con el cual convive una de las componentes de QR. Centraremos nuestro trabajo en el estudio de la posibilidad de aplicar un proceso de fotosíntesis para tratar condilomas de manera DIY/DIWO. Para ello estaremos trabajando con científicos y especialistas del Parque de Reserca Biomédica de Barcelona. Este tipo de tratamiento lleva el nombre de PDT (Terapia fotodinámica). Sabemos que ya se está utilizando tanto para HPV, canceres localizados y dermatología en general pero al tratarse de una técnica reciente queda todavía de difícil acceso. Los protocolos están bien documentados y accesibles y hay ya un consenso científico de que “PDT can be considered a highly effective and safe treatment option for anogenital condylomata acuminata” (http://www.ijidonline.com/arti).

Por lo cual, nuestro principal objetivo es de abrir la caja negra, como dicen lxs hackers o de abrir la píldora como decían lxs activistas afectados por el SIDA. El experimento que queremos hacer es de replicar los protocolos y las herramientas para abaratar costes y hacer accesible la información en una wiki, lo cual podría servir para centros comunitarios de salud, para personas que se encuentran excluidas del sistema público, pero también, para centros de salud de países del sur donde el HPV está todavía más expandido. Por otra parte, queremos desde el lado artístico y mediante la dimensión performativa de la auto-experimentación, formar localmente una masa critica de usuaries / expertes (entendiendo a les usuaries como expertes).

La idea es conseguir constituir este grupo los dos jueves de la residencia, prestando especial atención a colectivos cuyo acceso a la salud pública es complicado cuando no imposible como trabajadoras sexuales, personas LGTBIQ+, migrantes sin papeles, muchas de las cuales estamos muy expuestas al virus. Y que este grupo incluya también científicos, personal de salud, poderes públicos, y poder quizás influir en la introducción de la PDT en ambulatorios.

Asi que invitamos a quienes estén interesades, a sumarse al proceso. Serán bienvenides personas afectadas por el virus, colectivos vinculados a la prevención y/o tratamiento del HPV, personas o colectivos que tengan conocimientos en biología, medicina, dermatología y, a ser posible, que trabajen en estas disciplinas desde una perspectiva transfeminista. Así como también curiosas y portadoras de otras herramientas que puedan dar otras miradas sobre el proceso.
Aspiramos a la constitución de un grupo plural que haga aparecer las interseccionalidades en juego en enfermedades de transmisión sexual como el HPV. Y que de herramientas para no contraponer, o más bien poner en diálogo creativo, los cuidados, la prevención y el contagio con sexualidades abjectas, no reproductivas y múltiples.
Se trata, también, de generar conocimientos que rompan con los tabúes relacionados con el cuerpo enfermo. Un cuerpo siempre es un cuerpo enfermo y, al considerar la enfermedad como parte de la vida misma, ésta puede ser utilizada como herramienta creativa para deconstruir los procesos de normalización producidos por la noción de cuerpo sano.
Escríbenos!
Sesiones abiertas: jueves 23 y 30 de marzo 2017
e-mail de contacto: contact@quimerarosa.net"