PAROLE DE QUEER: ENTREVISTA AL SANTUARIO ALMAS VEGANAS. Por PAROLE DE QUEER

Anselmo, llegó al Santuario gracias a un rescate. Aquí podrá disfrutar de una vida digna.

Desde hace unos años viene proliferando en todo el mundo la creación de Santuarios de animales no humanos. Generalmente estos Santuarios están habitados por animales mal considerados de granja (aunque también existen otros tipos de Santuarios) que han sido abandonados o decomisados por su situación de maltrato y que por lo general, suelen llegar en muy malas condiciones tanto físicas como psicológicas. Las personas que habitan estos espacios dan su vida por les animales (al igual que la mayoría de les activistes antiespecista) con cuidados las veinticuatro horas del día . Para elles, es una de las formas de pagar la deuda que hemos adquirido con los animales por todo el mal que les hemos hecho y seguimos haciendo. Estos Santuarios son un lugar de resistencia, en donde a estos animales se les reconoce la condición de seres sintientes y sujetos de derecho frente al pensamiento que los cosifica e infravalora; son lugares de disidencia que se convierten en lugares utópicos para todes aquelles animales que han conocido el horror.

En el Estado Español existen alrededor de veinte Santuarios. Hoy hablamos con “Almas Veganas”, Santuario que se define como transfeminista, anticapitalista y anarquista.

-¿Cuándo y porqué surge la idea de construir un santuario?

Fani: Tenía una vida totalmente normativa con una pareja, un trabajo fijo, una hipoteca... hasta que de repente vi un vídeo en Youtube "101 razones para ser vegano", el cual me cambió drásticamente ya que trabajaba en una sala de despiece de cerdos. Después de ver ese vídeo di un giro radical a mi vida; dejé mi trabajo y todo atrás para dedicarme al activismo. Dentro de ese activismo estaba el apoyo a santuarios y refugios. Al santuario donde colaboraba como voluntaria le ofrecieron unos terrenos más grandes y mucho más amplios de los que tenían, y al rechazarlos me los ofrecieron a mí. Por supuesto no dudé en aprovechar esa oportunidad para crear un santuario ahí. Estuvimos un año y medio recaudando dinero para montar las instalaciones hasta que nos dimos cuenta que al ser terrenos cedidos por un hotel siempre estaríamos atades a la ideología de sus propietaries. Entonces decidimos buscar un terreno propio para poder gestionarlo todo bajo nuestros valores. En 2018 encontramos unas tierras adecuadas (muy boscosas, con abundante agua, con mucho espacio) para dar hogar a muches animales, y tres años después conseguimos obtener financiación para la compra de estas mismas, lo cual nos da mucha tranquilidad. Ahora mismo viven con nosotres unes ochenta animales rescatades, y somos cuatro personas que forman parte del colectivo.

Relax total para Kova. Kova tiene dos años y podrá disfrutar de su vida felizmente en el Santuario.

-¿Teníais experiencia anterior en el cuidado de animales?

No teníamos experiencia en el cuidado de animales de granja, sólo lo típico de haber cuidado animales mal llamades "de compañía". Pero podíamos y podemos contar con una red de apoyo entre santuarios con la cual hemos consultado muchas veces sobre la salud y el cuidado de las diferentes especies que íbamos acogiendo, y de ahí íbamos aprendiendo. Nuestras ganas y voluntad compensaron nuestra falta de experiencia.

-Os definís como un santuario tranfeminista, anticapitalista y anarquista con estas premisas ¿cómo se organiza la vida en un santuario?

Como colectivo antiespecista, anarquista y transfeminista nos organizamos de forma asamblearia, totalmente horizontal. Contrariamente a lo que la gente piensa, la anarquía requiere mucha disciplina, organización, responsabilidad propia y colectiva, y apoyo mutuo. Ligado a esto como anticapitalistas intentamos optar por la autogestión total del proyecto; como por ejemplo la impresión propia y venta de nuestra ropa solidaria, y reciclaje de alimentos y materiales para la construcción. El santuario es un espacio político, antiautoritario. Mantenerlo como espacio seguro para todes requiere un trabajo interno diario.

Momento mimos a Fruma

-¿Cuál es la situación legal de los santuarios?

Actualmente no se contemplan los santuarios como figura legal, esto nos perjudica en muchos aspectos. Al registrarse nuestra actividad como ganadera, estamos sujetes a las inspecciones por veterinaries especistas que ven y tratan a les animales como mercancías. Nos obligan identificarles con métodos intrusivos y dañinos para sus cuerpos (crotales y bolos intestinales). Un ejemplo de estas leyes especistas sería que podríamos vernos obligades al sacrificio de un animal por ser su carne tóxica para el consumo humano, aunque con dicha enfermedad el animal podría vivir perfectamente y al no ser nunca consumida su carne ninguna persona resultaría intoxicada. Actualmente se está trabajando entre varios santuarios para que se reconozca legalmente la figura de santuario para que haya una regulación más adecuada y sobre todo respetuosa hacia les animales.

Celia disfrutando de su charca

-Mantener y cuidar a tantes animales es muy costoso ¿de qué forma se os puede ayudar con esta labor?

Detrás de cada rescate hay muchos gastos de alimentación y veterinaria. Crear y mantener el santuario tiene un coste muy elevado; tenemos que pagar las tierras, crear y reparar instalaciones, obtener permisos...

Hay muchas formas de colaborar!

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